Las encuestas de usos del tiempo miden como distribuyen los hombres y las mujeres sus actividades principales y secundarias en un día cualquiera. La ventaja de disponer de estas medidas estadísticas es que nos permite visualizar qué tareas hacen hombres y mujeres y cuánto tiempo dedican para su realización.
Nuevamente, el sexismo implícito en nuestra sociedad, reflejado en los estereotipos y los roles de género, sitúan a los hombres y las mujeres en planos diferenciados. Si bien los dos utilizan un tiempo muy similar en las tareas productivas, es decir el trabajo remunerado, no sucede lo mismo en el caso de las tareas reproductivas, de cuidado del hogar, de los niños y de las personas de edad avanzada, que siguen recayendo, de manera muy importante sobre las mujeres.

Por otra parte, existen dos conceptos importantes cuando hablamos de usos del tiempo: doble presencia y doble jornada. El primer concepto hace referencia a la presencia de una mujer en un puesto de trabajo en el cual realiza una tarea remunerada mientras se ocupa también, en el mismo momento, de las tareas reproductivas. Por ejemplo, llamadas desde la oficina para ver si los hijos /as han comido o han vuelto de la escuela. El segundo concepto, doble jornada, hace referencia a la suma de dos jornadas de trabajo que recaen sobre las mujeres. Una remunerada al puesto de trabajo y una desvalorada, no retribuida y sin reconocimiento social, que se produce en el ámbito reproductivo y que se destina, básicamente, al cuidado de personas dependientes (descendencia y personas de la tercera edad)). Por ejemplo, mujeres que después de haber hecho su jornada laboral retribuida dedican una serie de horas a trabajos del hogar, como limpieza, provisión de alimentación, cuidado de la descendencia, etc.

Por este motivo, se propone la realización de dos actividades complementarias de usos del tiempo, a fin de que la comunidad educativa, tanto el profesorado como el alumnado, visualicen y reflexionen sobre las diferencias que todavía persisten entre hombres y mujeres en la distribución de su tiempo en un día cualquiera.

Finalmente, destacar que la realización de estas actividades os permitirá fomentar entre el alumnado los valores de la empatía hacia los otros, la equidad y la corresponsabilidad entre los hombres y las mujeres en el reparto de las tareas del hogar y el fomento de estrategias de negociación.